martes, 23 de diciembre de 2008

SIN TÍTULO.

A Carmela, que juega mis mismas cartas por partida doble.
¡Cuánto me enseñas! Un beso.
A veces es necesario frivolizar para sobrevivir. Comprendo que ésa debe ser la función de las llamadas “revistas del corazón”: desviar la atención hacia otros, olvidarse de nuestros pequeños o grandes dramas. El problema es que esas páginas a mí me dicen poco: no conozco a sus protagonistas (salvo a la royal family), no me interesan sus vidas, no me consuelan, no me concentro en ellas. No es snobismo, es la realidad.
Hay veces que te desgarran el corazón y crees que es el fin del mundo, pero sobrevives. Vuelven a despedazarte y vuelves a resucitar. Convives con el horror y casi casi, llegas a acostumbrarte, pero no, aún te queda lucidez para decir "basta". Y vuelves a perdonar, porque es amor. Hasta que llega el momento en que sabes que ya no, ya no, ya no.
La capacidad de regeneración del alma humana es inconmensurable. No hubiera creído yo mi propia historia si me hubiera sido contada a través de otros, protagonizada por otros.
Pero sobrevivo.
Cuando la vida te duele como un puñal en el centro del corazón, te agarras a cualquier cosa a tu alcance: instinto de supervivencia.
Me propongo unos días de frivolidad o de asideros más o menos superficiales, juguetones, banales (o no).
Lo mejor de escribir es que puede ser ficción hasta cuando lo haces en serio.

2 comentarios:

Donce dijo...

Jo, ésto es verdadero desde la A, hasta el "serio." Muy buena, niña, a Carmela le habrá gustado un montón!!

Como dices que no te gustan las navidades... pues no sé...: Feliz día de tu no cumpleaños!!!!
Eso sí puedo?

Toma besazo: MUACCCCCCCCCCCCCCCCCC

Adu dijo...

Gracias guapa, no he dicho que no me gusten, solo se debe deducir, el pensamiento es libre.
Yo te deseo, a ti y a todo el mundo de bien, paz y amor, pero SIEMPRE.