lunes, 28 de diciembre de 2009

Catarsis de Navidad

Dejar una casa donde hace años que vives es una catarsis. Por mucho que uno se proponga tirar cuantas más cosas mejor, la realidad es que la indecisión ocupa gran parte del tiempo:
-¿Lo tiro, lo llevo al punto R o se lo regalo a L?
Y en esta duda se tira uno cinco minutos, al menos.
Para la próxima mudanza espero tener menos cosas que ahora, muchas menos. Ahora mismo, estoy escuchando Radio 5 y veo que ni la tele ni Internet son imprescindibles. De hecho, hasta hace bien poco, ni existían. Tampoco la radio, ni la 5 ni la 1 ni la gaitas fritas. La gente se moría mucho antes, claro está, ¿sería de aburrimiento?
Bostezo, que barbaridad, debe ser que me aburro, la primera vez en mi vida que me aburro, nunca pensé que llegara a esto, je je.
Pues sigo bostezando, no lo comprendo. Estoy la mar de concentrada en esto que escribo. Pero bostezo.
Recuerdo a LFC quien me envidiaría seguro: poder estar escribiendo en la noche de Nochebuena. Recuerdo a JC con quien hablaré más tarde. A More. A otros… a todis mis amiguis especiales, que son unis cuantis.
Un recuerdo muy particular para mis hermanos que siempre están ahí aunque no estén. Campanitas verdes hojas de limón, canta la Radio (ahora es Radio Tormes).

3 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Mi vida está llena de mudanzas. En todas ellas he tirado cosas, pero ni así: siempre hay más en la siguiente.

Donce dijo...

Ay mi Adu linda de linda sonrisa y linda melena (que sepáis que está guapisisisíma con su pelazo liso...), que ojalá este año encuentres lo que quieras encontrar -aunque para ello tengas que tirar y tirar y tirar-.
Un beso grande, que te quiero un montón.
(Y a vosotris también, joíos-joías, no sus vayáis a poner celosis)

Marina dijo...

Todo es prescindible menos tus sentimientos y tu sonrisa. Guarda ambas y dame un trocito de cada una.
Besos corazón