Crónicas de un pueblo (8)

… Y me hablaban en lenguaje taurino, que si los toriles, que si la barrera… y yo, que no voy a los toros, no me enteraba de la misa la media, y no es que no vaya por una cuestión ideológica, que no, que creo que la fiesta como espectáculo tiene su cosa, su estética, su colorido, lo impresionante de la multitud gritando OLÉ al unísono, pero en fin, tampoco me muero por ello y como en mi familia no hay tradición pues eso, que no voy a los toros, pero vaya, si alguien me invita este año pues igual me animo, aunque un poco de pena sí que me dan los animalillos, la verdad, aunque nacieran para eso y aunque sea una muerte más digna que la del matadero y si lo piensa una bien es una fiesta algo ancestral, más aún que el fútbol, porque disfrutar con la muerte pues como que no, pero vaya, igual eso se arreglaba con la amnistía; no, no se dice así, con la cosa esa de que cuando un toro es muy valiente le perdonan y no le matan, ese gesto es bonito, ya ves, y valientes serán todos porque para empuñar sus cuernos contra un humano que es el único bicho que mata por placer... claro que eso el toro no lo sabe aún, aunque no tardará en saberlo…
Fotos sin manipular en:
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